La Vie Cave (en inglés caminos excavados), también conocida en italiano como Cavoni, es una red de carreteras del sur de Europa, encontrada en España, Italia, Turquía y tan al este como Jordania. En Italia vinculan en parte una necrópolis etrusca y varios asentamientos en el área entre Sovana, Sorano y Pitigliano. Consisten principalmente en trincheras de ancho y largo variables, excavadas como acantilados casi verticales en diferentes tipos de lecho rocoso, a veces de más de veinte metros de altura, posiblemente sirviendo como un sistema de defensa contra invasores, animales salvajes o fuerzas de la naturaleza. Aunque a menudo se fecha como tallado por civilizaciones prerromanas en el primer o segundo milenio a. C., los constructores y el propósito del sistema de carreteras no están claros en gran medida, y hay indicios de que son mucho más antiguos de lo que se supone.

En Italia, a veces son cortes estrechos, a veces más anchos, que a menudo se extienden profundamente a través de colinas y lechos rocosos, y se cree que han cambiado poco desde la época etrusca. Se dice que su construcción fue el resultado del desgaste de la toba blanda pero también del lecho rocoso más duro por las ruedas con llantas de hierro, que crearon surcos profundos que requirieron que el camino se recortara con frecuencia para obtener una superficie lisa. Su datación se deduce principalmente de los asentamientos entre los que pasan y los objetos de las tumbas junto a ellos. Esta datación es considerada incierta por aquellos que señalan el grado de petrificación de los llamados surcos de carretas.

En la época romana, los segmentos de Vie Cave se convirtieron en parte de un sistema vial que estaba conectado con el tronco principal de Via Clodia, una antigua vía que unía Roma y Manciano, a través de la ciudad de Tuscania, que se bifurcaba de la carretera de Cassia en el territorio de Lazio. Incluso se incluyen segmentos más anchos en el sistema vial moderno.