La Tête de Chien (Cabeza de perro) es un promontorio rocoso de 550 m (1804 pies) de altura cerca del pueblo de La Turbie en el departamento de Alpes Marítimos de Francia. . Tiene vistas al Principado de Mónaco y es el punto más alto de la carretera Grande Corniche.
El diplomático estadounidense Samuel S. Cox, en su libro de viajes de 1870 Buscar rayos de sol de invierno en la Riviera, Córcega , Argel y España escribieron que la Tête de Chien se parecía más a una tortuga que a la cabeza de un perro, y creían que 'Tête de Chien' era una corrupción de 'Tête de Camp', ya que era donde César estacionó sus tropas después la conquista de la Galia. Vere Herbert, la heroína de la novela Moths de Ouida de 1880, se describe viviendo bajo la Tête de Chien, "...a unas pocas millas del brillante Infierno [Mónaco]".
En 1897, Gustave Saige lo describió como "un escarpe vertical de forma circular que le da un aspecto característico; es la Cabeza de Perro".
...Leer másLa Tête de Chien (Cabeza de perro) es un promontorio rocoso de 550 m (1804 pies) de altura cerca del pueblo de La Turbie en el departamento de Alpes Marítimos de Francia. . Tiene vistas al Principado de Mónaco y es el punto más alto de la carretera Grande Corniche.
El diplomático estadounidense Samuel S. Cox, en su libro de viajes de 1870 Buscar rayos de sol de invierno en la Riviera, Córcega , Argel y España escribieron que la Tête de Chien se parecía más a una tortuga que a la cabeza de un perro, y creían que 'Tête de Chien' era una corrupción de 'Tête de Camp', ya que era donde César estacionó sus tropas después la conquista de la Galia. Vere Herbert, la heroína de la novela Moths de Ouida de 1880, se describe viviendo bajo la Tête de Chien, "...a unas pocas millas del brillante Infierno [Mónaco]".
En 1897, Gustave Saige lo describió como "un escarpe vertical de forma circular que le da un aspecto característico; es la Cabeza de Perro".
En 1944, Leopold Bohm, comandante de una compañía de defensa alemana, fue destinado en la Tête de Chien y vio estrellarse en el mar un avión que volaba bajo y que había sido perseguido por otros dos aviones. La observación de Bohm fue el día de la desaparición del aviador Antoine de Saint-Exupéry, y se ha especulado que Bohm vio el último vuelo de Saint-Exupéry.
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